El desarrollo de los niños se produce de forma progresiva pero siempre siguiendo determinados carrilles del desarrollo, es decir, que todo bebé comenzará a sostener la cabeza primero para luego comenzar a sentarse, para finalmente comenzar a dar los primeros pasos.
En los padres genera gran ansiedad el momento en que el niño podrá dar los primeros pasos solos, pero no se lo debe forzar, ya que será algo que ocurrirá naturalmente. Pero previamente es necesario que se cumplan otros estadios del desarrollo físico y neurológico de todo niño.
Se considera aproximadamente que el bebé comenzará a caminar a los doce meses, siempre existiendo un amplio margen de variabilidad entre las personas. Algunos bebés comienzan a dar sus primeros pasos con once meses y otros tienen quince meses y no caminan. La demora en el inicio del caminar genera una gran ansiedad en los padres que suelen consultar múltiples veces al médico. Hay que tener en cuenta que cada niño tiene su tiempo normal de maduración y crecimiento, siempre dentro de rangos esperables. Apurar al niño en este proceso no es beneficioso para él, ya que logrará caminar cuando tenga la habilidad adquirida completamente, las ansiedades previas son perjudiciales para el mismo.