Cada niño tiene un desarrollo distinto no todos aprenden a hablar o caminar a la misma cantidad de meses. Esto no significa que el bebé presente algún retraso mental sino que cada uno se toma su tiempo para desarrollarse y esto no quiere decir que los que más demoran continuarán con ese patrón a lo largo de su vida.
En cuanto al desarrollo intelectual se debe tener claro que los principales indicadores del mismo no aparecen antes del primer año.
El desarrollo infantil se divide en cuatro fases:
Social: la velocidad con que la un pequeño aprende a sonreír, a reconocer una voz o un rostro no brinda información acerca de cómo se comportará en el entorno social. Un importante retraso en esta fase puede significar que padece de problemas de audición, de visión o de desarrollo emotivo.
Lenguaje: si un bebé de pocos meses puede enlazar frases y maneja un vocabulario amplio puede ser un aviso que cuando crezca tendrá una gran capacidad para hablar. Lo importante en esta etapa es que comprenda lo que se le dice.
Desarrollo motor: hay niños que presentan una gran actividad ya desde el vientre materno y logran aprender a saltar, correr o sentarse muy rápidamente.
El desarrollo de los bebes evoluciona de arriba hacia abajo es decir, se comienza desde la parte superior y recién aprenderán una nueva actividad cuando ya haya sido asimilada otra.
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