Seguro que has oído hablar alguna vez sobre los sillones de lactancia. Se conoce como sillones de lactancia a aquellos que producen un vaivén relajante para el bebé y favorece la producción de leche materna. Ahora que ya sabes para qué sirve, si quieres conocer las ventajas que ofrece un sillón de lactancia durante el embarazo toma nota.
Por qué contar con un sillón de lactancia durante el embarazo
Las ventajas de contar con un sillón de lactancia van más allá de poder adoptar una posición más cómoda en un periodo tan importante y prolongado como puede ser el de la lactancia. Estas son todas las ventajas adicionales.
Ayuda a mejorar la circulación
A medida que avanza el embarazo los problemas de circulación sanguínea aparecen y se incrementan. Gracias al balanceo que ofrece un sllón de lactancia la circulación se mantiene en movimiento, siendo un gran modo de estimular el cuerpo. De este modo, si no tienes todo el tiempo que quieres para salir a andar o no te apetece con este sillón puedes ayudarte a mantener tu circulación a punto.
Alivia el dolor de espalda
Conforme avanzan las semanas de embarazo el feto pesa más y los dolores de espalda se incrementan. Gracias a los sillones de lactancia se puede reducir el dolor de espalda de manera considerable. Para ello bastará con sentarse con los pies algo elevados y gracias a su respaldo acolchado capaz de ajustarse a la musculatura el dolor de espalda se podrá aliviar de manera considerable.
Buen modo de tratar las varices
Durante el embarazo algunas mujeres ven que les aparecen varices fruto de la mala circulación. Precisamente el balanceo del sillón de lactancia, como decimos, es capaz de estimular el buen funcionamiento del sistema circulatorio y así se previene también que aparezcan las las venas varicosas.
Adiós al cansancio de brazos
Durante el embarazo notarás como te cansas más y aquí las extremidades del cuerpo no son una excepción, lo que hará que te sientas más incómoda. Las sillas o mecedoras para lactantes suelen destacar por contar con cómodoson apoyabrazos que sirven, como su nombre indica, para apoyar los brazos pero también en el caso de que ya tengas a tu bebé contigo para descansar la cabeza de tu pequeño, evitando la sensación de cansancio que también se deriva de tener el pequeño en brazos durante mucho tiempo. Los apoyabrazos acolchados son un valor añadido que se debe buscar en todo buen sillón de lactancia y cuya función es notable tanto antes como después del embarazo.
Un modo más de hacer ejercicio
Con el sencillo balanceo también conseguirás hacer ejercicio. Y es que lograrás que el peso de tu cuerpo se mueva hacia detrás y hacia delante, de tal modo que caerá la presión arterial y tu frecuencia de respiración con los beneficios para la salud que ello tiene.