Los bebés requieren un control con un médico pediatra de forma periódica para valorar como viene creciendo. Se observan varios aspectos del bebé, desde su vitalidad, aspecto, habilidades adquiridas, alimentación y estado nutrición.
El peso del bebé permite valorar un aspecto fundamental que es su crecimiento y estado nutricional, para saber si la alimentación que recibe es suficiente para su adecuado funcionamiento de todas sus funciones vitales.
El pediatra en cada control tomará el peso del bebé sin ropa en una balanza especialmente diseñada para saber cuanto aumentó de peso desde el control anterior. Puede suceder que se mantenga en un peso determinada o incluso disminuya, lo que estará indicando algún problema de salud actual o pasado, como una infección respiratoria o un cuadro de diarrea.
El valor del peso del bebé hay que tomarlo en cuanta según los valores previos, para ir realizando una gráfica de los resultados obtenidos. De esta forma se podrá saber si la tendencia es a mantener el peso o aumentarlo.
También el aumento de peso del bebé puede ser exagerado lo que requerirá un análisis exhaustivo del bebé por parte del médico pediatra para investigar posibles causas de esta situación.
Por todos estos motivos es fundamental controlar el peso del bebé durante los primeros años de vida.