El período de gestación es muy delicado y por eso es necesario seguir una serie de recomendaciones con respecto a la alimentación, ya que es fundamental conocer los alimentos que son muy beneficiosos y algunos que deben evitarse durante esta etapa. Así, es posible prevenir ciertas enfermedades que afecten tanto a la madre como al bebé y garantizar que ambos reciban suficientes nutrientes para mantenerse saludables.
Una dieta equilibrada
La alimentación en el embarazo es muy importante, y desde el inicio es esencial hacer una revisión de todos los alimentos cuyo consumo pueden ser beneficiosos en la gestación, ya que existen muchos que contienen las vitaminas y minerales que requiere el bebé para formarse correctamente.
La ingesta de proteínas como la carne y el pollo es ideal en el embarazo, por lo que se recomienda incluirla en la dieta. Asimismo, se sugiere consumir algunos tipos de pescado como la sardina y el boquerón, ya que poseen omega 3, que permite regular los niveles de colesterol y ayuda a mantener el corazón sano.
Lo indispensable: frutas, verduras y cereales
Hay diversos tipos de frutas, verduras y múltiples cereales cuya ingesta es muy beneficiosa en el embarazo:
- Algunas de las que pueden mencionarse son: el kiwi, las naranjas y las fresas, ya que parte de ellas están constituidas por vitamina C.
- En este período es indispensable comer alimentos ricos en calcio, por lo que el consumo de plátanos, piñas, manzanas e higos puede ser de gran ayuda para obtener sus beneficios de manera natural.
- Mientras tanto, el ácido fólico puede encontrarse en la papaya y las frambuesas, razón por la cual también es fundamental incluirlas en la dieta.
- Por otra parte, se deben comer múltiples verduras, tales como: la remolacha, la cual tiene silicio, potasio y hierro. Mientras que los espárragos, además de contener fibra, tienen muchas vitaminas.
- Adicionalmente, se pueden consumir zanahorias y calabaza. Y en relación con las hortalizas, una de las mejores alternativas es la espinaca, aunque esta debe comerse con moderación, al igual que los champiñones y los guisantes.
- Con respecto a los cereales, es necesario que al preparar las comidas puedan integrarse con porciones de arroz y pasta. El pan debe seleccionarse de manera minuciosa, ya que en algunos casos los que contienen gluten pueden generar estreñimiento.
Cabe destacar que por lo general todas las frutas son aptas para ser consumidas durante el embarazo. Sin embargo, las mujeres deben tener en cuenta que comer cítricos de manera indiscriminada puede causar acidez estomacal. De igual forma, deben evitarse aquellas frutas que sean transgénicas, ya que al ser tratadas con productos químicos suelen causar daños a la salud.
Por otra parte, tanto las frutas como las verduras deben ser lavadas varias veces para eliminar cualquier residuo o las bacterias que estas puedan tener, por lo que remojarlas en abundante agua ayuda a removerlos fácilmente, y hace posible su ingesta sin ningún tipo de riesgos que afecten la salud de la madre o el bebé.
Los alimentos que deben evitarse
En cuanto a los alimentos que no se deben ingerir durante el embarazo pueden mencionarse algunos tipos de pescado como el atún, el mero e incluso el pez espada, ya que poseen ciertos niveles de mercurio que pueden tener una influencia negativa en este período. De igual forma tampoco es recomendable consumir mariscos o pescados crudos, pues estos contienen ciertas bacterias que influyen negativamente en la salud de la madre y su bebé.
Los lácteos que no han pasado por el proceso de pasteurización también tienen múltiples bacterias que aumentan el riesgo de aborto, por lo que es necesario tener precaución y evitar el consumo de la leche o los quesos que no han tenido tal tratamiento. En el caso de los huevos, el rábano, la soja y la alfalfa deben estar muy bien cocidos para reducir la posibilidad de contraer salmonela.
De igual forma, en distintos sitios web es posible encontrar información con respecto a ciertos alimentos que no es recomendable ingerir en el embarazo, unos datos que también hay que tener muy en cuenta.
Una consecuencia de la mala alimentación
En la gestación es importante tener en cuenta el riesgo de anemia, ya que muchas veces se produce al no comer los alimentos adecuados. Esto debe tratarse a tiempo para evitar complicaciones, por lo que es fundamental seguir una dieta equilibrada y continuar con la ingesta de alimentos con un alto contenido de hierro, así como también de ácido fólico para disminuir el riesgo de contraer esta enfermedad y que la madre esté saludable durante el embarazo y por ende el bebé también se mantendrá sano.
Asimismo, se recomienda acudir a un médico que pueda hacer un chequeo constante de la madre y determine si necesita algún medicamento o tratamiento especial para subir la hemoglobina y combatir la anemia.
Un buen estilo de vida
Aunque tener un control con relación a los alimentos que se ingieren durante el embarazo es un factor fundamental en esta etapa, también es importante llevar un estilo de vida tranquilo y seguir ciertas recomendaciones muy útiles:
- Ingerir abundante agua ayudará a que la mujer se mantenga siempre hidratada, a diferencia de otras bebidas gaseosas que contienen ciertos químicos, y al consumirse en exceso pueden generar molestias y malestares.
- El consumo de azúcar en exceso también puede ser un factor perjudicial, por lo que es recomendable que al comer dulces se haga con moderación.
- Realizar actividades tranquilas y anti estrés, las cuales sean relajantes y beneficien la salud física y mental de la madre en período de gestación.
- Es necesario evitar auto medicarse. Ante cualquier situación anormal lo ideal es acudir a un médico.
De esta manera, las mujeres embarazadas deben tener en cuenta cada uno de estos detalles, ya que con ellos es posible que todo este proceso transcurra con total normalidad y sin ningún tipo de problemas. Consumir los alimentos apropiados garantizará que los órganos del bebé se formen adecuadamente, e incluso facilitará que ambos permanezcan en perfectas condiciones aún después del parto.