El embarazo supone varios cambios en el organismo femenino, como forma de adaptarse a las nuevas demandas del feto que se encuentra dentro del útero.
A lo largo de las semanas el cuerpo femenino va sufriendo distintos cambios que pueden pasar desapercibidos para algunas mujeres o ser muy incómodos.
El dolor de espalda en la embarazada es un motivo de consulta frecuente al médico por varios aspectos. Primero porque supone una molestia que dificulta los movimientos e incluso el dormir, por otra parte la embarazada tiene temor a tomar medicamentos por poder haber una afectación a su hijo.
Por este motivo se debe consultar al médico siempre frente a dolor de espalda en la embarazada, que generalmente se debe a una causa muscular, por cambios en su centro de gravedad y las fuerzas que debe soportar. Un mejor descanso, evitar muchas horas de pie y caminar más lentamente son algunas de las recomendaciones que pueden contribuir a disminuir el dolor de espalda en la embarazada.
La consulta al médico permite que la familia esté tranquila sobre la medicación que va a consumir para calmar su dolor, hay que tener en cuenta que no todos los medicamentos son aptos para tomar durante el embarazo. Una mujer embarazada nunca debe automedicarse sin indicación médica.
