El embarazo como etapa esperable y normal de la mujer requiere cierto cuidado para llevarlo de la mejor manera. El embarazo supone cambios fisiológicos en el organismo femenino, no sólo físicos sino sicológicos.
Para lograr un embarazado de bajo riesgo y tener éxito un aspecto a tener en cuenta es el peso. Antes de que la pareja quiera tener un hijo es necesario que la mujer se aproxime a su peso ideal. Distanciarse del mismo produce que sea más difícil concebir un embarazo, y de lograrlo hay mayores posibilidades de tener un bebé con peso aumentado.
Llegar al embarazo con un peso adecuado debe ser la prioridad para toda mujer, de esta forma se beneficiará no sólo su cuerpo sino su bebé.
El embarazo nunca debe ser visto como una opción para bajar de peso, la mujer embarazada nunca debe hacer restricciones en la comida porque compromete el correcto desarrollo del feto. Si la mujer tiene sobrepeso u obesidad luego de finalizado el embarazo será el momento de comenzar un plan de adelgazamiento estricto.
Durante el embarazo no puedo comenzarse ningún plan de adelgazamiento para no perjudicar a su propio hijo. Un peso adecuado disminuye el riesgo materno y fetal durante el embarazo.
