El parto es un momento que trae mucha ansiedad y nerviosismo, por una parte posibilita el nacimiento de un nuevo integrante de la familia, pero implica un proceso que está cargado de incertidumbre.
Es importante que los padres participen de un curso durante el embarazo de preparación para el parto, unas pocas clases le permitirán a la mujer aprender la técnica de respiración durante el trabajo de parto.
En el momento del trabajo de parto, la respiración ocupa un lugar clave porque tiene que ser exitosa para garantizar el suficiente aporte de oxígeno al feto.
Durante cada contracción la sangre del bebé no se oxigena, por este motivo una adecuada oxigenación por parte de la madre es necesaria para garantizar el aporte correcto. Se debe respirar profundamente, acompañando las contracciones en el momento expulsivo.
Contar con una partera posibilita que colabore en el momento del trabajo de parto, al igual que estar con su pareja en el proceso.
La respiración durante el parto tampoco tiene que ser rápida, tiene que tener un ritmo normal y constante, evitando las pausas. Una pequeña preparación previa al parto asegurará un entrenamiento adecuado que posibilitará una mejor salud tanto del bebé como su madre.